Usar un trapeador a vapor es una simple cuestión de llenar la unidad con agua, calentarla y permitirle usar su vapor para eliminar la suciedad de sus pisos sellados. Esta opción de limpieza ecológica no requiere nada más que agua y calor para hacer el trabajo, por lo que es una forma segura de limpiar alrededor de niños y mascotas. Si encuentra manchas difíciles, simplemente quédese sobre ellas un poco más con el trapeador para dejar que el vapor haga su trabajo.
Crédito: ymgerman / iStock / GettyImages Los trapeadores a vapor solo necesitan agua para hacer brillar los pisos sellados y embaldosados.Paso 1
Barra o aspire su piso para recoger cualquier residuo suelto. Eliminar la suciedad suelta asegura que no quede atrapado en el trapeador de vapor y dañarlo.
Paso 2
Prepare el trapeador colocando una almohadilla de limpieza recién lavada en la parte inferior de la unidad. Llene el depósito de agua con agua destilada hasta la línea de llenado y luego conecte el trapeador a una toma de corriente y enciéndalo.
Paso 3
Espere a que se encienda la luz indicadora de su trapeador a vapor. Cuando lo hace, su trapeador está lo suficientemente caliente como para producir vapor y está listo para usar.
Paso 4
Si está utilizando el trapeador a vapor en un piso de madera o laminado por primera vez, pruebe el trapeador en un área discreta. De lo contrario, comience a trapear el piso con movimientos suaves y uniformes. El trapeador debe emitir vapor automáticamente a medida que lo mueve hacia adelante y recoge la suciedad a medida que se desliza hacia atrás. Si el vapor no sale del cabezal del trapeador, presione el botón de vapor o bombee el mango del trapeador varias veces para que funcione. Si encuentra una mancha dura mientras trapea, simplemente sostenga el trapeador sobre ella durante aproximadamente ocho a 10 segundos para permitir que el vapor se afloje.
Paso 5
Cuando termine de trapear, desenchufe la unidad y deje que se enfríe. Cuando la fregona se haya enfriado, retire la almohadilla de limpieza y guarde la fregona de vapor. Lave la almohadilla de limpieza en la lavadora con agua tibia; lo mejor es limpiarla sola en lugar de mezclarla con otras prendas. Use detergente líquido para ropa en lugar de polvo y evite el suavizante de telas. Cuelgue la almohadilla para secarla o colóquela en la secadora en la posición más baja.